El Salón de Claustros del Edificio de las Escuelas Mayores llevará el nombre de Lucía de Medrano en homenaje a las mujeres que a lo largo de la historia de la Universidad de Salamanca han estudiado en sus aulas. El acto de presentación de esta nueva nomenclatura ha contado con las intervenciones del rector Daniel Hernández Ruipérez, junto a Nieves Sanz Mulas, directora de la Unidad de Igualdad, y Sonsoles Fernández del Viso, miembro del grupo de trabajo “Presencia invisible. Mujeres Ocultas”. 

Lucía de Medrano es junto a otras destacadas figuras como Beatriz Galindo, una de las llamadas “Docta Puellae”, que en la España de finales del siglo XV y principios del XVI florecieron al calor de los estudios de las lenguas y de la cultura clásica que el Humanismo y el Renacimiento habían recuperado. Estudios que, a juicio de la profesora Sanz Mulas, “se vieron favorecidos por la actitud de la reina Isabel de Castilla, ella misma, aventajada estudiante de latín y decidida defensora y protectora de la educación de las mujeres”.

La directora de la Unidad de Igualdad recordó que Lucía de Medrano, poetisa, latinista y filósofa, que nació en Atienza en el siglo XV y llegó a desempeñar una cátedra de Humanidades en la Universidad de Salamanca, “logró tal nivel intelectual y de conocimientos, que no sólo igualó a Beatriz Galindo, también conocida como La Latina, sin que incluso la superó”.

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