La Universidad de Salamanca acoge esta semana un curso extraordinario con especialistas nacionales y de Estados Unidos

JPA/DICYT La Universidad de Salamanca organiza hoy y mañana, 16 y 17 de mayo de 2010, el curso extraordinario "Research Ethics, Clinical Ethics", que tiene como objetivo analizar las novedades del campo de la ética en lo referido a la investigación científica y a las prácticas clínicas. Para ello, destaca la presencia de la Case Western Reserve University de Cleveland (Estados Unidos), así como expertos españoles del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), de la Universidad de La Laguna y de la Universidad de País Vasco. El Grupo de Ética de la Universidad de Salamanca investiga desde hace años en este campo e intenta analizar en este encuentro las últimas novedades. María Teresa López de la Vieja, catedrática del Departamento de Historia del Derecho y Filosofía Jurídica, Moral y Política de la Universidad de Salamanca y directora del curso, ha explicado a DiCYT que a lo largo de estos días los expertos se centrarán en asuntos como los comités éticos en la regulación de temas biomédicos, así como asuntos relacionados con la investigación. "Vamos a intentar aportar las novedades que conocemos para saber qué se está planteando en la ética aplicada a la investigación y a la clínica", comenta. En esta puesta al día, "tenemos proyectos que tienen que ver con la internacionalización de los grupos españoles, ya que el trabajo que se está realizando en España no sólo es comparable sino que es igual de valioso que el que se lleva a cabo en otros países", afirma la experta. Los debates en este campo están de plena actualidad. Sin ir más lejos, "el viernes pasado se aprobó el proyecto de ley sobre la muerte digna y todo lo relacionado con los tratamientos al final de la vida es muy complicado", apunta. En este sentido, es interesante el problema de los pacientes que no pueden manifestar su opinión al respecto por problemas mentales o por alguna otra discapacidad. Por otra parte, es muy importante controlar y regular las mejores prácticas en el campo de la investigación. Por ejemplo, para "garantizar a los sujetos que participan en un estudio que se van a proteger sus datos". Sin embargo, también es necesario "abrir lo suficiente estos datos para que se puedan utilizar para investigar", de manera que los expertos se encuentran ante "un equilibrio difícil de resolver". Asimismo, "la investigación con animales es todo un mundo, hay que garantizar que haya un cierto nivel de bienestar animal cuando se realiza un ensayo o en el transcurso de un proyecto". En este terreno, el trabajo de los especialistas en Ética relacionados con la biomedicina y la investigación científica se enfrentan a un trabajo múltiple. En primer lugar, "la parte empírica consiste en recoger datos y casos para analizar qué tienen en común y qué se puede aprender de ellos", pero después, "la parte normativa indica qué prácticas se pueden tolerar y cuáles no". En realidad, "en Ética trabajamos sobre todo en este segundo nivel, pero a partir de lo primero, muchos datos y casos, para ver qué problemas se han planteado y qué soluciones se les han dado", indica María Teresa López de la Vieja.