Técnicas empleadas para estudiar cianobacterias sirven también para investigar las neuronas

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05/10/2012
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Agencia de Noticias DiCYT
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Una experta de la Universidad de Alicante explica en el Instituto de Neurociencias de Castilla y León que algunos procesos moleculares son similares en bacterias y cualquier otro tipo de células

JPA/DICYT Raquel Cantos Coll, investigadora del Departamento de Microbiología y Genética de la Universidad de Alicante, ha explicado hoy en el Instituto de Neurociencias de Castilla y León (Incyl) de la Universidad de Salamanca algunas de las técnicas que emplea su grupo de investigación para conocer los mecanismos de adaptación de las cianobacterias ante los cambios en su entorno. En realidad, los procesos moleculares y las técnicas que se emplean para estudiarlos son similares a los de cualquier tipo de células, como las neuronas. Por eso, los avances en este campo a la larga también son útiles para luchar contra enfermedades.

Su equipo está interesado en la transducción de señales de estrés en cianobacterias, organismos fotosintéticos que necesitan captar la luz y los nutrientes del medio en el que habitan para poder vivir. "Cuando estas condiciones de luz o los nutrientes faltan se generan una serie de mecanismos para adaptarse a la nueva realidad", una situación de estrés para la bacteria. "Estos mecanismos conllevan la activación o inactivación de determinadas proteínas", comenta la experta en declaraciones a DiCYT.

La adaptación se lleva a cabo porque "alguna proteína detecta la señal de que algo ha cambiado y le da una orden a otra proteína para producir un determinado efecto en la célula". Esa transformación de un tipo de señal en otro es lo que se conoce como transducción y el equipo de Raquel Cantos Coll intenta "identificar cuáles son las proteínas que detectan las señales, cómo lo hacen, cómo se comunican para pasar la información de que algo ha cambiado, sobre qué genes actúan y cómo esos genes consiguen la adaptación a las nuevas condiciones".

En principio, esta línea de trabajo parece lejana a los estudios que se desarrollan en centros de investigación vinculados a enfermedades humanas, como el Incyl. Sin embargo, "utilizamos una serie de estrategias moleculares que sirven para contestar preguntas del mismo tipo, tanto en cianobacterias como en neuronas: cómo interaccionan las proteínas o cómo responden ante estímulos de estrés", indica la científica, que hace años pasó por los laboratorios de la Universidad de Salamanca.

Preguntas similares

Por eso, el objetivo de la charla de esta investigadora en Salamanca ha sido dar a conocer estas técnicas a científicos y estudiantes de Neurociencias. "Nosotros las empleamos para contestar nuestras preguntas, pero en muchos casos podrían responder preguntas similares en neuronas", asegura.

Un ejemplo es la técnica denominada "doble híbrido de levaduras", muy empleada para estudiar la interacción entre proteínas en las cianobacterias, pero útil también para estudiar la interacción entre proteínas en alzhéimer. "Son campos distintos que usan la misma técnica", insiste.

Del mismo modo, los científicos de la Universidad de Alicante generan bacterias modificadas genéticamente para inactivar alguno de sus genes y ver así cuál es su función al observar el resultado de su ausencia, es decir, la misma estrategia que se emplea en los ratones knockout, que sirven para estudiar muchísimas enfermedades. "Las técnicas que se utilizan para estudiar la expresión de los genes en bacterias son las mismas que en neuronas y en cualquier otro tipo de células", resume.

Resistencia a antibióticos

Por lo que respecta a la utilidad de su estudio de las cianobacterias, Raquel Cantos Coll explica que la transducción de señales de estrés "es el mecanismo que utilizan las bacterias para adaptarse a los antibióticos que utilizamos, de manera que pueden protegerse de su acción y así algunos antibióticos están dejando de ser efectivos". Por eso, "si conocemos mejor este sistema, podríamos inactivarlo y conseguir que los antibióticos actuales sigan siendo efectivos".