«MILLÁN-ASTRAY SUPO EXPLOTAR LA FIGURA DE UNAMUNO»

«MILLÁN-ASTRAY SUPO EXPLOTAR LA FIGURA DE UNAMUNO»

Cuerpo: 

«Millán-Astray supo explotar la figura de Unamuno» Colette y Jean-Claude Rabaté, ayer en Madrid Colette y Jean-Claude Rabaté Hispanistas y catedráticos En una biografía del intelectual español, estos expertos en su figura desvelan documentos inéditos MANUEL P. VILLATORO MADRID Definir a Miguel de Una muno es una ardua tarea. Liberal y pacifista convencido, fue contrario a las guerras que vivió la España de finales del XIX y principios del XX. Así, hasta la llegada de la II República, que recibió con los brazos abiertos. Sin embargo, y tal y como afirman los hispanistas y expertos en su figura Colette y Jean-Claude Rabaté, pronto se desencantó con sus sucesivos gobiernos y apoyó la sublevación. La clave es que, según cuentan en su nueva obra, «Miguel de Unamuno (1864-1936)» (Galaxia Gutenberg, 2019), lo hizo durante un tiempo ínfimo. Hasta que se percató de la realidad que había tras ella. Saben de lo que hablan, pues han estudiado su vida a través de una infinidad de documentos. Entre ellos, un manuscrito inédito que presentan y que el también rector esbozó antes de fallecer. ¿Por qué este intelectual desprende entonces cierto tufo a oportunista entre el público La conclusión a la que han llegado es que el servicio de propaganda (y en especial José MillánAstray, con quien mantuvo un tenso enfrentamiento el 12 de octubre de 1936 en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca) supo explotar su figura. -¿Creyó Unamuno en la República -Tras su regreso del exilio (en el que tuvo acogidas multitudinarias en Irún, San Sebastián, Bilbao o Valladolid) proclamó la II República en Salamanca desde el balcón del Ayuntamiento. Dijo que creía en la continuidad histórica a partir de su teoría de la intrahistoria: era partidario de que los acontecimientos son como las olas del mar, pasan y se van, pero en el fondo queda la verdadera historia de los pueblos. En abril de 1931 creía que la sociedad iba a poder expresarse y tener el poder de nuevo, pero se fue desencantando con los gobiernos por sus medidas. Jamás entendió, por ejemplo, que se quitaran los crucifijos de las escuelas. -¿Fue real su enemistad con Azaña -Su enemistad con Manuel Azaña fue explotada y utilizada como arma por la derecha. No tenían buena relación, pero es verdad que lo apoyó mucho cuando fue destituido y que, al final de sus vidas, fueron dos figuras que se podían reunir. El Unamuno frente a la Guerra Civil y el Azaña que, en sus discursos, pedía paz, piedad y perdón. -¿Apoyó el levantamiento militar -En el libro demostramos que su apoyo al alzamiento fue tímido y corto. Él pensaba que los militares se irían. Creía que protagonizarían un pronunciamiento como los del siglo XIX y que, después, permitirían el paso a una república. Te nía razones para pensarlo. El soldado que proclamó el estado de guerra en Salamanca terminó con un «¡Viva la República!», lo mismo que el general Queipo de Llano. Por eso se mostró partidario del golpe, como demuestra el que Franco le restituyera en el cargo de rector del que le había destituido Azaña. Pero Unamuno se equivocó y, cuando se dio cuenta de ello, confesó que había sido ingenuo. -¿Qué hizo cuando se percató de ello -Escribió dos artículos («Examen de conciencia» y «En el torbellino») en los que afirmó que un bando era tan cruel como el otro. Explicó que los «hunos» (los republicanos, haciendo un paralelismo con las tropas de Atila) eran igual de crueles que los «hotros» (los rebeldes). Aunque al final afirmó que los «hotros» se habían convertido en peores que los «hunos». En uno de sus últimos borradores (inédito y que hemos descubierto nosotros) dejó patente que la causa de la Guerra Civil era el resentimiento, el odio del pueblo español contra sí mismo. -¿Usó el franquismo la figura de Unamuno -Exacto. Hay varios ejemplos. Aceptó ser miembro del Ayuntamiento rebelde, aunque solo una semana; después, jamás volvió. Pero la propaganda usó esto en su favor. Le sacaron una foto posando al lado del nuevo alcalde, que era militar. Pasó lo mismo con una supuesta donación de 5.000 pesetas al bando nacional que se publicó en la prensa. Es poco probable que diera esa enorme cantidad, aunque sí que contribuyera, porque los funcionarios estaban obligados a ello. Lo que es innegable es que el mismo diario que dio esa información afirmó, después de la muerte de Unamuno, que habían sido... Día de la Raza «Lo del 12 de octubre no fue una bronca de café, a Unamuno le costó quedar silenciado y el rectorado» MANUSCRITO INÉDITO DE UNAMUNO* Valdecasas. conversación con el rector Madruga. Hoy le toca a usted, amigo, un desahogo de prisionero. Usted sabe que... Que vengan acá a asesinarme como a Pérez Martín y a Vila. En esa Granada... Peores los hotros que los hunos. Estos ingenerados, salvajes, aquellos degenerados, resentidos, pervertidos. García Lorca. Me adherí y dije lo de que hay que salvar... que repitió Franco. Que equivocaba. No es civilización sino militarización, no occidental sino africana, no cristiana sino pagana. Del repugnante imperialismo pagano italiano y tudesco. Yo creí que era un mov[imiento] popular y laico. No. Enténdamonos, la iglesia no es el clero ni el ejército es la oficialidad -la casta que dijo Primo de Ribera (sic) y ahora son el clero no la iglesia y la oficialidad no el ejército al vengarse del pueblo que justamente les desprecia. ¡Intelectuales! Lo de Millán Astray. Se acercan días terribles, dementalidad. Convencer y renunciar venganza. (Cuartilla autógrafa inédita de Miguel de Unamuno. Notas escritas en la misma hoja que el soneto «Unciendo a pesar nombres...», 25 de diciembre de 1936, CMU, 084/147). UNAMUNO FRANCO MILLÁN-ASTRAY ISABEL PERMUY ¡15.000 pesetas! Sí firmó (pero no escribió) un manifiesto de la Universidad de Salamanca en el que se condenaba la barbarie roja, pero le coaccionaron para ello. Millán-Astray, el jefe de propaganda de Franco, explotó la imagen de Unamuno. Hemos descubierto también que vigilaban las palabras de Unamuno. -¿Cómo fue el enfrentamiento con Millán-Astray el 12 de octubre -Hemos hallado un informe que aclara el suceso, pero lo daremos a conocer en un documental de Manuel Menchón sobre Unamuno. Lo que sí podemos decir es que el suceso fue muy parecido a lo que explicamos hace diez años en nuestra primera biografía. La realidad va en contra del mito extendido y creado por Portillo, pero su espíritu es el mismo. Habló de la anti-España, hizo referencia a la crítica contra los catalanes y los vascos... Puede que la propaganda censurara su intervención, pero no podemos negar que hubo un enfrentamien to. Se ha dicho que fue una bronca de café, pero Unamuno fue fulminado por ella. El Casino lo expulsó esa misma tarde y al día siguiente el Ayuntamiento. También fue destituido... ¿De verdad no pasó nada Fue el enfrentamiento del mayor intelectual de Europa del primer tercio del siglo XX con el fundador de la Legión. La lucha de la ideología liberal y humanista contra la cultura de lo macabro y la muerte. -¿Qué opinan de la nueva película de Alejandro Amenábar -Aunque, por mucho que se diga en algunos medios, no asesoramos a Alejandro Amenábar, hemos visto ya la película y los actores aportan mucho. El resultado es bueno e interesante. Pero, como el mismo director diría, es una interpretación, no un producto histórico. Se toma algunas licencias. Como contrapartida, el proyecto en el que trabajamos con Menchón busca ser lo más riguroso posible.

Posición: 
36
Medio: 
ABCMA
Procedencia: 
MADRID
Número de Lectores: 
422 000
Tirada: 
106 363
Difusión: 
74 292
Sector: 
INFORMACION GENERAL
Periodicidad: 
Diaria
Clasificación: 
Información General
Identificador Noticia: 
128 011 314.00
Titular: 
«MILLÁN-ASTRAY SUPO EXPLOTAR LA FIGURA DE UNAMUNO»
Autor: 
MANUEL P. VILLATORO MADRID
Fecha: 
Martes, 24 Septiembre, 2019
Superficie: 
1 155.80
Página: 
44
Fotografía: 
1
Texto libre: 
«Millán-Astray supo explotar la figura de Unamuno» Colette y Jean-Claude Rabaté, ayer en Madrid Colette y Jean-Claude Rabaté Hispanistas y catedráticos En una biografía del intelectual español, estos expertos en su figura desvelan documentos inéditos MANUEL P. VILLATORO MADRID Definir a Miguel de Una muno es una ardua tarea. Liberal y pacifista convencido, fue contrario a las guerras que vivió la España de finales del XIX y principios del XX. Así, hasta la llegada de la II República, que recibió con los brazos abiertos. Sin embargo, y tal y como afirman los hispanistas y expertos en su figura Colette y Jean-Claude Rabaté, pronto se desencantó con sus sucesivos gobiernos y apoyó la sublevación. La clave es que, según cuentan en su nueva obra, «Miguel de Unamuno (1864-1936)» (Galaxia Gutenberg, 2019), lo hizo durante un tiempo ínfimo. Hasta que se percató de la realidad que había tras ella. Saben de lo que hablan, pues han estudiado su vida a través de una infinidad de documentos. Entre ellos, un manuscrito inédito que presentan y que el también rector esbozó antes de fallecer. ¿Por qué este intelectual desprende entonces cierto tufo a oportunista entre el público La conclusión a la que han llegado es que el servicio de propaganda (y en especial José MillánAstray, con quien mantuvo un tenso enfrentamiento el 12 de octubre de 1936 en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca) supo explotar su figura. -¿Creyó Unamuno en la República -Tras su regreso del exilio (en el que tuvo acogidas multitudinarias en Irún, San Sebastián, Bilbao o Valladolid) proclamó la II República en Salamanca desde el balcón del Ayuntamiento. Dijo que creía en la continuidad histórica a partir de su teoría de la intrahistoria: era partidario de que los acontecimientos son como las olas del mar, pasan y se van, pero en el fondo queda la verdadera historia de los pueblos. En abril de 1931 creía que la sociedad iba a poder expresarse y tener el poder de nuevo, pero se fue desencantando con los gobiernos por sus medidas. Jamás entendió, por ejemplo, que se quitaran los crucifijos de las escuelas. -¿Fue real su enemistad con Azaña -Su enemistad con Manuel Azaña fue explotada y utilizada como arma por la derecha. No tenían buena relación, pero es verdad que lo apoyó mucho cuando fue destituido y que, al final de sus vidas, fueron dos figuras que se podían reunir. El Unamuno frente a la Guerra Civil y el Azaña que, en sus discursos, pedía paz, piedad y perdón. -¿Apoyó el levantamiento militar -En el libro demostramos que su apoyo al alzamiento fue tímido y corto. Él pensaba que los militares se irían. Creía que protagonizarían un pronunciamiento como los del siglo XIX y que, después, permitirían el paso a una república. Te nía razones para pensarlo. El soldado que proclamó el estado de guerra en Salamanca terminó con un «¡Viva la República!», lo mismo que el general Queipo de Llano. Por eso se mostró partidario del golpe, como demuestra el que Franco le restituyera en el cargo de rector del que le había destituido Azaña. Pero Unamuno se equivocó y, cuando se dio cuenta de ello, confesó que había sido ingenuo. -¿Qué hizo cuando se percató de ello -Escribió dos artículos («Examen de conciencia» y «En el torbellino») en los que afirmó que un bando era tan cruel como el otro. Explicó que los «hunos» (los republicanos, haciendo un paralelismo con las tropas de Atila) eran igual de crueles que los «hotros» (los rebeldes). Aunque al final afirmó que los «hotros» se habían convertido en peores que los «hunos». En uno de sus últimos borradores (inédito y que hemos descubierto nosotros) dejó patente que la causa de la Guerra Civil era el resentimiento, el odio del pueblo español contra sí mismo. -¿Usó el franquismo la figura de Unamuno -Exacto. Hay varios ejemplos. Aceptó ser miembro del Ayuntamiento rebelde, aunque solo una semana; después, jamás volvió. Pero la propaganda usó esto en su favor. Le sacaron una foto posando al lado del nuevo alcalde, que era militar. Pasó lo mismo con una supuesta donación de 5.000 pesetas al bando nacional que se publicó en la prensa. Es poco probable que diera esa enorme cantidad, aunque sí que contribuyera, porque los funcionarios estaban obligados a ello. Lo que es innegable es que el mismo diario que dio esa información afirmó, después de la muerte de Unamuno, que habían sido... Día de la Raza «Lo del 12 de octubre no fue una bronca de café, a Unamuno le costó quedar silenciado y el rectorado» MANUSCRITO INÉDITO DE UNAMUNO* Valdecasas. conversación con el rector Madruga. Hoy le toca a usted, amigo, un desahogo de prisionero. Usted sabe que... Que vengan acá a asesinarme como a Pérez Martín y a Vila. En esa Granada... Peores los hotros que los hunos. Estos ingenerados, salvajes, aquellos degenerados, resentidos, pervertidos. García Lorca. Me adherí y dije lo de que hay que salvar... que repitió Franco. Que equivocaba. No es civilización sino militarización, no occidental sino africana, no cristiana sino pagana. Del repugnante imperialismo pagano italiano y tudesco. Yo creí que era un mov[imiento] popular y laico. No. Enténdamonos, la iglesia no es el clero ni el ejército es la oficialidad -la casta que dijo Primo de Ribera (sic) y ahora son el clero no la iglesia y la oficialidad no el ejército al vengarse del pueblo que justamente les desprecia. ¡Intelectuales! Lo de Millán Astray. Se acercan días terribles, dementalidad. Convencer y renunciar venganza. (Cuartilla autógrafa inédita de Miguel de Unamuno. Notas escritas en la misma hoja que el soneto «Unciendo a pesar nombres...», 25 de diciembre de 1936, CMU, 084/147). UNAMUNO FRANCO MILLÁN-ASTRAY ISABEL PERMUY ¡15.000 pesetas! Sí firmó (pero no escribió) un manifiesto de la Universidad de Salamanca en el que se condenaba la barbarie roja, pero le coaccionaron para ello. Millán-Astray, el jefe de propaganda de Franco, explotó la imagen de Unamuno. Hemos descubierto también que vigilaban las palabras de Unamuno. -¿Cómo fue el enfrentamiento con Millán-Astray el 12 de octubre -Hemos hallado un informe que aclara el suceso, pero lo daremos a conocer en un documental de Manuel Menchón sobre Unamuno. Lo que sí podemos decir es que el suceso fue muy parecido a lo que explicamos hace diez años en nuestra primera biografía. La realidad va en contra del mito extendido y creado por Portillo, pero su espíritu es el mismo. Habló de la anti-España, hizo referencia a la crítica contra los catalanes y los vascos... Puede que la propaganda censurara su intervención, pero no podemos negar que hubo un enfrentamien to. Se ha dicho que fue una bronca de café, pero Unamuno fue fulminado por ella. El Casino lo expulsó esa misma tarde y al día siguiente el Ayuntamiento. También fue destituido... ¿De verdad no pasó nada Fue el enfrentamiento del mayor intelectual de Europa del primer tercio del siglo XX con el fundador de la Legión. La lucha de la ideología liberal y humanista contra la cultura de lo macabro y la muerte. -¿Qué opinan de la nueva película de Alejandro Amenábar -Aunque, por mucho que se diga en algunos medios, no asesoramos a Alejandro Amenábar, hemos visto ya la película y los actores aportan mucho. El resultado es bueno e interesante. Pero, como el mismo director diría, es una interpretación, no un producto histórico. Se toma algunas licencias. Como contrapartida, el proyecto en el que trabajamos con Menchón busca ser lo más riguroso posible.
Número de Páginas: 
2
Tipo de Impresión: 
Blanco y Negro
Archivo PDF: 
prensa/noticias/201909/00247Q5U.pdf
Identificador Tema: 
93 644
Tema: 
UNIVERSIDAD DE SALAMANCA