OLIMPIADA DE BIOLOGÍA. CON ESPÍRITU CIENTÍFICO

OLIMPIADA DE BIOLOGÍA. CON ESPÍRITU CIENTÍFICO

Cuerpo: 

Pablo Gómez (izquierda), junto a los otros representantes de Castilla y León en la Olimpiada Española // ABC OLIMPIADA DE BIOLOGÍA Con espíritu científico Camino del triunfo mundial Pablo Gómez García, alumno de 2º de Bachillerato del IES Ramón Olleros Gregorio de Béjar, ha logrado la medalla de Oro en la competición nacional C, ROSADO VALLADOLID El esfuerzo y el trabajo, pero tam bién una de esas carambolas que la vida ofrece a veces, le han dado una alegría al estudiante de 2º de Bachillerato en el IES Ramón Olleros de Béjar (Salamanca) Pablo Gómez García: ganar la medalla de oro en la XVII Olimpiada Española de Biología, celebrada en Oviedo en abril pasado y, con ello, poder acudir a la Olimpiada Internacional, que tendrá lugar en Armenia el próximo mes de julio de 2022. Fue finalista de las Olimpiadas de Biología en Castilla y León, pero no se clasificó para la competición nacional. Después, varios estudiantes que sí se habían clasificado no pudieron asistir y acudió él en su lugar a las pruebas para, finalmente, lograr el oro. «Me avisaron y tuve la suerte de que había acabado ya los exámenes del trimestre, de tener más tiempo y mi profesor, Julián Barrios, me pudo dar más materiales para preparar las pruebas». Por delante tiene unos meses ajetreados porque del 8 al 10 de junio tendrá los exámenes de acceso a la universidad «y cuando los acabe, prepararé la fase internacional», afirma sin disimular el entusiasmo. De su profesor, Julián Barrios, dice que «ha tenido mucho que ver» con que haya llegado tan alto en sus estudios «porque dedica mucho esfuerzo a esta preparación y es algo a lo que los profesores no están obligados, que hacen por amor al arte y para que descubramos lo que nos gusta». De hecho, asegura que fue este profesor el que despertó en él el interés por la Biología en 4º de la ESO. Por eso, también les da «las gracias» a él y al director de su instituto, Ángel Ballesteros, «por el apoyo» recibido del centro. Un niño curioso Pablo Gómez explica que ya «de pequeño, era muy curioso, siempre estaba con libros de ciencia y mi madre me decía "mira a ver si eres científico" de mayor» y ahora ya se lo plantea: «Me gustaría hacer Biotecnología porque me gusta la biología aplicada a COMPETIRÁ EN LA OLIMPIADA INTERNACIONAL QUE SE CELEBRARÁ EN ARMENIA EN JULIO Las pruebas decisivas En Oviedo Pablo tuvo que enfrentarse a distintas pruebas en la Olimpiada de Oviedo. Tuvo una fase teórica de 150 preguntas tipo test divididas en dos partes, una de biología general y otra de genética y biología molecular. Después llegó la fase práctica, en la que las pruebas versaban sobre microbiología, microscopía, genética y zoología (en esta última tuvo que identificar insectos de unas trampas instaladas en Asturias), «la prueba más difícil», según dice. También tuvo una práctica de identificación de bacterias en un cultivo, otra prueba sobre ADN mitocondrial y una tercera de análisis de agua potable y no potable, así como otra de análisis de mucosa bucal para determinar si era de un paciente con una patología. «Trabajar bajo presión es complicado», sostiene, pero anima a «estar tranquilo, confiar en ti y manejar esa presión». la industria, a los avances científicos, y espero dedicarme a la investigación». Gracias a su clasificación en las olimpiadas pudo asistir en la Universidad de Salamanca a clases especiales de biología práctica, de botánica y fisiología y, acompañado de profesores de la Universidad salmantina, visitar el Instituto de Neurociencias, lo que «fue una pasada porque te acercas mucho al trabajo de un investigador y ves que no es un trabajo monótono, que cada día hay algo diferente que hacer». También es consciente de que «hacer ciencia es un camino muy largo, que en España no hay mucha inversión en ello y digamos que al final tocará ir al extranjero, pero si logras descubrir algo importante para curar una enfermedad es algo muy importante que te llevas». Pablo está acostumbrado a estudiar y afirma que «la mayoría» de los alumnos que llegan a las olimpiadas «tenemos buenas notas en el instituto porque nos organizamos bien el tiempo y podemos gestionar bien nuestros estudios», lo que no le resta tiempo libre: «Mis compañeros me preguntan cómo lo hago y digo que entreno dos horas diarias en el gimnasio porque, al final, es beneficioso, es una vía de escape que te hace tener la mente despejada; si estás toda la tarde estudiando te agobias mucho y no trabajas mejor», añade. Las pruebas en las olimpiadas le llevaron «mucho esfuerzo y mucha presión, aunque llevó «una estrategia, la de no responder si no estaba seguro, porque resta si respondes mal». Y le resultó. Igual que es consciente de que su caso es un ejemplo de motivación para sus dos hermanos pequeños, también lanza un mensaje a otros estudiantes que puedan dudar si se presentan a estas competiciones para que lo hagan porque «yo fui sin expectativas y si ganas, y lo logré, te abrirá muchísimas puertas y si no, puedes descubrir lo que te gusta o lo que no y qué opciones profesionales puedes tener en el futuro».

Posición: 
14
Medio: 
ABCLE
Procedencia: 
CASTILLA-LEON
Número de Lectores: 
12 236
Tirada: 
5 278
Difusión: 
3 059
Sector: 
INFORMACION GENERAL
Periodicidad: 
Diaria
Clasificación: 
Información General
Identificador Noticia: 
147 131 496.00
Titular: 
OLIMPIADA DE BIOLOGÍA. CON ESPÍRITU CIENTÍFICO
Autor: 
C, ROSADO VALLADOLID
Fecha: 
Miércoles, 18 Mayo, 2022
Superficie: 
702.90
Página: 
53
Fotografía: 
1
Texto libre: 
Pablo Gómez (izquierda), junto a los otros representantes de Castilla y León en la Olimpiada Española // ABC OLIMPIADA DE BIOLOGÍA Con espíritu científico Camino del triunfo mundial Pablo Gómez García, alumno de 2º de Bachillerato del IES Ramón Olleros Gregorio de Béjar, ha logrado la medalla de Oro en la competición nacional C, ROSADO VALLADOLID El esfuerzo y el trabajo, pero tam bién una de esas carambolas que la vida ofrece a veces, le han dado una alegría al estudiante de 2º de Bachillerato en el IES Ramón Olleros de Béjar (Salamanca) Pablo Gómez García: ganar la medalla de oro en la XVII Olimpiada Española de Biología, celebrada en Oviedo en abril pasado y, con ello, poder acudir a la Olimpiada Internacional, que tendrá lugar en Armenia el próximo mes de julio de 2022. Fue finalista de las Olimpiadas de Biología en Castilla y León, pero no se clasificó para la competición nacional. Después, varios estudiantes que sí se habían clasificado no pudieron asistir y acudió él en su lugar a las pruebas para, finalmente, lograr el oro. «Me avisaron y tuve la suerte de que había acabado ya los exámenes del trimestre, de tener más tiempo y mi profesor, Julián Barrios, me pudo dar más materiales para preparar las pruebas». Por delante tiene unos meses ajetreados porque del 8 al 10 de junio tendrá los exámenes de acceso a la universidad «y cuando los acabe, prepararé la fase internacional», afirma sin disimular el entusiasmo. De su profesor, Julián Barrios, dice que «ha tenido mucho que ver» con que haya llegado tan alto en sus estudios «porque dedica mucho esfuerzo a esta preparación y es algo a lo que los profesores no están obligados, que hacen por amor al arte y para que descubramos lo que nos gusta». De hecho, asegura que fue este profesor el que despertó en él el interés por la Biología en 4º de la ESO. Por eso, también les da «las gracias» a él y al director de su instituto, Ángel Ballesteros, «por el apoyo» recibido del centro. Un niño curioso Pablo Gómez explica que ya «de pequeño, era muy curioso, siempre estaba con libros de ciencia y mi madre me decía "mira a ver si eres científico" de mayor» y ahora ya se lo plantea: «Me gustaría hacer Biotecnología porque me gusta la biología aplicada a COMPETIRÁ EN LA OLIMPIADA INTERNACIONAL QUE SE CELEBRARÁ EN ARMENIA EN JULIO Las pruebas decisivas En Oviedo Pablo tuvo que enfrentarse a distintas pruebas en la Olimpiada de Oviedo. Tuvo una fase teórica de 150 preguntas tipo test divididas en dos partes, una de biología general y otra de genética y biología molecular. Después llegó la fase práctica, en la que las pruebas versaban sobre microbiología, microscopía, genética y zoología (en esta última tuvo que identificar insectos de unas trampas instaladas en Asturias), «la prueba más difícil», según dice. También tuvo una práctica de identificación de bacterias en un cultivo, otra prueba sobre ADN mitocondrial y una tercera de análisis de agua potable y no potable, así como otra de análisis de mucosa bucal para determinar si era de un paciente con una patología. «Trabajar bajo presión es complicado», sostiene, pero anima a «estar tranquilo, confiar en ti y manejar esa presión». la industria, a los avances científicos, y espero dedicarme a la investigación». Gracias a su clasificación en las olimpiadas pudo asistir en la Universidad de Salamanca a clases especiales de biología práctica, de botánica y fisiología y, acompañado de profesores de la Universidad salmantina, visitar el Instituto de Neurociencias, lo que «fue una pasada porque te acercas mucho al trabajo de un investigador y ves que no es un trabajo monótono, que cada día hay algo diferente que hacer». También es consciente de que «hacer ciencia es un camino muy largo, que en España no hay mucha inversión en ello y digamos que al final tocará ir al extranjero, pero si logras descubrir algo importante para curar una enfermedad es algo muy importante que te llevas». Pablo está acostumbrado a estudiar y afirma que «la mayoría» de los alumnos que llegan a las olimpiadas «tenemos buenas notas en el instituto porque nos organizamos bien el tiempo y podemos gestionar bien nuestros estudios», lo que no le resta tiempo libre: «Mis compañeros me preguntan cómo lo hago y digo que entreno dos horas diarias en el gimnasio porque, al final, es beneficioso, es una vía de escape que te hace tener la mente despejada; si estás toda la tarde estudiando te agobias mucho y no trabajas mejor», añade. Las pruebas en las olimpiadas le llevaron «mucho esfuerzo y mucha presión, aunque llevó «una estrategia, la de no responder si no estaba seguro, porque resta si respondes mal». Y le resultó. Igual que es consciente de que su caso es un ejemplo de motivación para sus dos hermanos pequeños, también lanza un mensaje a otros estudiantes que puedan dudar si se presentan a estas competiciones para que lo hagan porque «yo fui sin expectativas y si ganas, y lo logré, te abrirá muchísimas puertas y si no, puedes descubrir lo que te gusta o lo que no y qué opciones profesionales puedes tener en el futuro».
Número de Páginas: 
1
Tipo de Impresión: 
Blanco y Negro
Archivo PDF: 
prensa/noticias/202205/002FLJE0.pdf
Identificador Tema: 
93 644
Tema: 
UNIVERSIDAD DE SALAMANCA
Nombre medio: 
Abc (Ed. Castilla y León)