La Universidad de Salamanca encabeza la candidatura de la Fundación Vicente Ferrer al Premio Nobel de la Paz, según informó el rector, Daniel Hernández Ruipérez, durante la rueda de prensa celebrada esta mañana, en la que compareció junto al consejero de Interior y Justicia, Alfonso Fernández Mañueco, y el director general de la Fundación Vicente Ferrer y sobrino del fundador, Jordi Folgado Ferrer La razón por la que la Universidad ha decidido encabezar la candidatura de la Fundación Vicente Ferrer es que, según el rector, “es importante que se otorgue el Premio Nobel de la Paz a una organización como ésta que se dedica de modo real y concreto a la cooperación, con acciones que están produciendo unos frutos tangibles, que está contribuyendo de verdad, de forma práctica y eficaz a la erradicación de la pobreza y de las enfermedades y a la mejora en suma de las condiciones de vida, fundamentalmente en la India”. Hasta ahora el Nobel de la Paz no ha recaído nunca en una Organización de Desarrollo, sólo en organizaciones que han denunciado la pobreza, pero no en las que han contribuido a erradicarla. Según el director general de la Fundación Vicente Ferrer, “recibir el Premio Nobel sería importante no por el premio en sí, sino por la oportunidad de mostrar a otras organizaciones que existen modelos de gestión en el mundo de la cooperación que hacen posible erradicar la pobreza profunda”. Para ello, asegura Folgado, para que acabar con la pobreza deje de ser una utopía y para que la consecución de los objetivos del milenio de 2015 sea una realidad, no es suficiente dedicar recursos, hacen falta también sistemas de trabajo, es decir, debe haber un compromiso conjunto de las instituciones y de las Organizaciones dedicadas al Desarrollo. Así, la Fundación Vicente Ferrer, que lleva cuarenta años trabajando por el desarrollo en ámbitos como la sanidad, la educación, la ecología o la igualdad, puede aportar su experiencia y demostrar que hay maneras de conseguirlo, creando sistemas de trabajo eficaces y moldeables, que se adapten a las circunstancias, y que tengan un compromiso hasta que la necesidad desaparezca, es decir, creando organizaciones estables que no sean nómadas del desarrollo. Con el apoyo de la Universidad de Salamanca y de la Junta de Castilla y León, la Fundación Vicente Ferrer presentará de nuevo su candidatura al Nobel de la Paz antes del 30 de enero de 2011. Un Nobel que, según Folgado, “si se consigue permitiría dar un paso de gigante en la consecución de los objetivos del milenio”. Por eso la Universidad de Salamanca ha decidido encabezar dicha candidatura para la próxima convocatoria del Nobel, “impulsarla y apoyarla con el renombre que la institución académica posee a nivel internacional”, subrayó el rector en la rueda de prensa celebrada en la Sala de Retratos del Rectorado, a la que también asistieron la vicerrectora de Relaciones Internacionales, Noemí Domínguez, y el director general de Políticas Migratorias y Cooperación al Desarrollo de la Junta de Castilla y León, Félix Colsa.