Investigadores de las escuelas de Béjar y Zamora realizan un trabajo de I+D+i en colaboración la empresa salmantina Plásticos Dúrex

JPA/DICYT Investigadores de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Industrial de Béjar y de la Escuela Politécnica Superior de Zamora, pertenecientes a la Universidad de Salamanca, están comenzando a desarrollar un proyecto de I+D+i que tiene como objetivo analizar las propiedades mecánicas de las piezas de destinadas al sector de la automoción que fabrica la empresa salmantina Plásticos Dúrex.

Esta compañía produce, entre otras cosas, varios elementos que se emplean en la fabricación de vehículos, como amortiguadores y piezas que se emplean como aislantes del chasis. Generalmente, se trata de elementos de plástico, aunque también los hay de caucho y caucho-metal. Para los ingenieros, es importante conocer perfectamente las características de estos materiales, saber cuál es su resistencia y el conjunto de sus propiedades. Para ello se ha establecido la colaboración con los investigadores de la Universidad de Salamanca.

"Llevamos a cabo el ensayo mecánico de las piezas de plástico que ellos fabrican", afirma en declaraciones a DiCYT José Alejandro Reveriego Martín, profesor del Departamento de Ingeniería Mecánica en la Escuela de Béjar, donde se realizan las pruebas, aunque en este proyecto también participa el profesor Roberto García, experto de la Escuela Politécnica de Zamora.

"Nuestro trabajo de ingeniería certifica la capacidad mecánica de este tipo de piezas", comenta Reveriego, una misión que puede permitir mejorar los procesos de fabricación, el producto final y las garantías que ofrece la empresa, que "tiene una parte importante de sus ventas en el sector de la automoción".

Compresión

El proyecto aún está en sus fases iniciales, pero el trabajo que los investigadores tienen por delante se basa esencialmente en la realización de ensayos mecánicos de compresión, de forma que "se comprueba la carga máxima que pueden aguantar estos elementos y la deformación que tienen como consecuencia de esa carga", indica el experto de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Industrial de Béjar.

Mediante la máquina de ensayo de la que dispone el Departamento de Ingeniería Mecánica se fuerzan al máximo las piezas, hasta su rotura, de manera que los científicos pueden sacar sus conclusiones acerca de sus propiedades mecánicas y vuelven a enviarlas a los técnicos de la empres, que completan los análisis con los restos.

Esta iniciativa de investigación y desarrollo supone un buen ejemplo de colaboración entre el mundo de la Universidad y de la empresa con el objetivo de generar riqueza a través del conocimiento, en este caso, a través de la Fundación General de la institución académica salmantina.